Querida Mery:

¿Cómo estas Mery?, yo espero que bien. Bueno como ya te habrás enterado estoy en la cárcel y eso es porque me cogió la policía confundiéndome con el líder de un sindicato de obreros.
La verdad, mi querida Mery, que la vida en el trabajo industrial es muy dura mas de lo que yo me pensaba, la industria se divide en dos bandos, uno es el de los trabajadores y otro el de los capitalistas, a los que no les importa matarnos a trabajar con una cantidad de horas, que no nos compensa el salario tan limitado que recibimos mensualmente. Al dueño solo le importa aumentar su producción y superar a la competencia.
Imaginate, el dueño le exige al capataz la productividad que necesita y este a su vez nos da ordenes desde un despacho exigiéndonos mas y mas prisa, claro, nos tenemos que apurar porque sino corremos el riesgo de perder nuestro trabajo y nuestro seguro medico, además que por poco pareciera que quisiera que trabajáramos más que las propias máquinas.
También, te cuento querida, que tendrías que ver la cantidad de niños que trabajan aquí por no poder tener acceso a una escolaridad, y por eso algunos niños roban para subsistir.
Claro, también está a la vista los adelantos tecnológicos que hay, ya he visto barcos a vapor, y se está utilizando más el carbón mineral que el vegetal. También aumento mucho el uso de la electricidad como fuente de energía.
Ah, y ¿sabes?, comenzaron a utilizar la prensa escrita, donde nos enteramos de las noticias.
Todos estos avances están muy buenos, pero se hace notar mucho la diferencia de vida que lleva un obrero a la de un burgués o la de un capitalista, como tú le quieras llamar.
Bueno, querida novia mía, podría resumirte esto, diciéndote que en el trabajo de una industria en lo último que se van a fijar de ti es en tu salud, a ellos lo único que les importa es explotar al máximo a sus trabajadores para tener un alto nivel de productividad, y claro eso sí, pagándote un sueldo muy limitado.
Me parece que ya te voy a dejar de escribir cariño. Te mando un abrazo fuerte y cuídate mucho. Ya nos veremos cuando salga de aquí.



Suerte.